La aparición de los dispositivos móviles ha traído cambios notables para las empresas. El uso de smartphones y tablets por parte de los usuarios se traduce en una mayor puesta de atención por parte de las marcas hacia estos dispositivos, interés que se traduce en el incremento de la inversión publicitaria a través de ellos. Por ello a continuación analizamos la diez tendencias tradicionales propuestas por marketingprofs.com, sobre diseño web que han quedado obsoletas con este surgimiento, motivo por el que su destino no es otro que la desaparición.
1. Diseños complicados
Desde la aparición de la web hasta el momento en que se escriben estas líneas ha pasado mucho tiempo, tanto que las empresas deben darse cuenta de que las modas del pasado no se corresponden con los diseños web actuales. Así, las compañías deben olvidarse de sus antiguos diseños pesados y recargados de imágenes y textos y dar paso a versiones web novedosa y actuales, entre las que destacan los diseños simples y minimalistas. Apple marcó la diferencia hace tiempo y ahora el resto está siguiendo su misma pauta.
2. Diseño responsive
El incremento de los dispositivos móviles exige una mejora de de los tiempos de carga de las páginas web, cuyos tiempos deben estar disponibles lo antes posible para los usuarios. Un cambio que pasa por la adaptación web a los nuevos dispositivos, aligerando los contenidos y facilitando a los usuarios la navegación por ellos. Menos es más, dice el refrán, y en este caso está más atinado que nunca. ¿El motivo? La necesidad que tienen las empresas de diseñar espacios web que mejoren la percepción de los clientes y su experiencia de compra.
3. Textos que parecen testamentos
Los nuevos tiempos dicen adiós a los textos densos y pesados, que no hacen sino acumular palabras clave con el objetivo de posicionarse mejor en Google. Ahora los diseños de las páginas web buscan la estimulación visual de los usuarios, por lo que los textos escritos directamente están sobrando.
4. Hacer clic, ese objeto de deseo
El diseño de hoy en día busca que los usuarios cliquen fácil y rápidamente sobre los contenidos y productos o servicios de las marcas, fomentando los procesos de compra. Es la principal enseñanza que las marcas han de tener a partir del desarrollo de su diseño web, pues una composición errónea puede generarle disgustos en el corto y largo plazo dada la inversión realizada y el escaso índice de resultados obtenido.
5. Webs que parecen no tener fin
Los dispositivos móviles han simplificado todo, también la longitud de las páginas. Así, en este espíritu minimalista que corre por las venas de los diseñadores el largo de las páginas se ve reducido a una ligera pasada en ellas por parte de los usuarios. El objetivo de este cambio es esforzarse por comunicar lo necesario, limitando el espacio para ello. Una decisión que los usuarios agradecen, dada su tendencia a leer cada vez menos.
6. Jerarquías de contenido erróneas
Columnas de imágenes bajo las cuales las empresas limitan a colocar los productos de sus catálogos, cual física estantería se tratara. Este diseño, a imagen y semejanza de Pinterest, tiene los días contados, pues ahora lo que se lleva es una jerarquía de contenidos similar y equilibrada, en la que se desarrollen más espacios para las categorías que se tienen que anunciar, dejando al internauta la percepción de que hay mayor libertad en esa página web.
7. Imágenes
La generalidad o los contenidos altamente sensibles han muerto en lo que a imágenes se refiere. Y es que ahora se llevan las fotos audaces, originales y reales, que potencien los procesos de identificación de los consumidores con su contenido y la personalidad de la marca que los anuncia.
8. Tipografías aburridas
Si antes comentábamos que los textos largos han acabado, cual grasa ante los efectos del Fairy, sus tipografías lo más legibles posibles, también. Y es que los diseñadores apuestan por tipos de letras grandes y audaces, que llamen la atención de los lectores desde la primera pasada.
9. Diseños en 3D
De igual modo, atrás han quedado los diseños de imágenes en tres dimensiones. Ahora lo que se lleva son contenidos planos, en línea con las tendencias minimalistas. Una apuesta que hace olvidar a las marcas de lo que estos componentes significaban para ellas: distraer la atención de los consumidores, involucrándolos poco en los procesos de compra y haciendo que estos permanecieran menos tiempo en sus páginas webs.
10. Gráficos estáticos
Lo mismo puede decirse de los textos y gráficos de carácter estático, cuyo rasgo más significativo ha sido la transición del uso de tecnología Flash a HTML5. De este modo, asistimos a una edad de oro de los vídeos, en los que se desarrollan los contenidos de las marcas a través de pocas imágenes y mensajes limitados. Todo sea por no cansar en exceso el ya delicado comportamiento de los usuarios.
FUENTE: puromarketing.com